Presementación

¿Quién dijo que no somos nadie para criticar lo que los demás dicen o hacen? Quiero decir... ¿realmente la crítica sirve de algo? Eso depende de a quién le preguntemos. Si hablamos con, por ejemplo, Losantos, nos dirá que sí, que si es para criticar al tío Zapa, todo vale. Sin embargo, las cosas se vuelven un tanto turbias en cuanto intentamos fijar nuestro objetivo en una persona que no tiene esa capacidad de autocrítica. Tal vez, sólo tal vez, en un mundo ideal, desaparecerían los 40 todo el mundo sería capaz de aprender de todo el mundo, y quizá el libre intercambio de información carezca de barreras, exceptuando, por supuesto, la barrera que impone la moral y la ética de cada uno.

Llegados a este punto, quiero presentaros este pequeño proyecto personal. Actos Enervantes, como su descripción describe (¿Ofiamente?), es un blog de crítica social, política y sobre el comportamiento humano. Por ejemplo, ¿habéis leído la entrevista del director de El País a Rajoy? Desde luego, el tío se gasta un humor que déjelo usted ir. Canela fina el Mariano. Veamos algunos ejemplos.

P. Edad de jubilación, ¿a los 65 años?
R. Otra prioridad es que la jubilación sea verdaderamente a los 65, porque la media de jubilación en España son los 63. Y yo creo que habría que introducir estímulos para que la gente siguiera trabajando.

Perfecto, señor Rajoy. Ahora definamos esos "estímulos" de los que usted habla.

Bueno, quizá podríamosh decir que el eshtímulo principal de trabajar hasta los 65 años sería... ¿Aguantar un par de añosh menosh a los nietosh?

Porque, en serio, ¿Quién cojones piensa: "¡Joder! ¡Sólo me quedan dos años para jubilarme! ¡Con lo bien que estaba yo en esta mina de uranio, que tan bien me ha tratado! ¡Por favor, alargadla un poquito más! ¡Hasta los... setenta! ¡Sí, éso es! ¡Hasta los setenta!

Hay que joderse. El que cree eso de que "el trabajo es salud", es porque sabe que en su oficinita tecleando con aire acondicionado se está de puta madre, pero claro, cuando tienes que doblar el lomo para plantar cuatro patatas (Que luego eso es otra, plantar cuatro patatas para que luego llegue la industria y te diga: "Hale, majo, te damos veinte céntimos, ¿Vale? ¡No te quejes, que tienes para un paquete de pipas! Si esque estos agricultores..."), la cosa cambia, ¿Verdad?

Lo que yo haríasería darles un par de palas, y a cavar (mi abuelo dixit). En serio. La solución está en las palas. Ellas lo saben todo.

Ésto no ha sido más que un pequeño ejemplo de la materia a tratar aquí. No indica que todo lo tratado hable de política, ni abarcará solamente un lado de la tabla, es decir, no posicionaré mis creencias políticas (con lo religioso no puedo prometer nada) en un lado de la balanza. Por ejemplo, si habéis viajado en metro, sabréis que solamente un pequeño trayecto bastaría para llenar blogs y blogs dedicados al tema, pero eso es asunto de otra ocasión.

Seguramente, al ver mucha letra, os agobiéis, y hablando de política, lo difícil es mantenerse activo y despierto. Pero tranquilos, intentaré hacerlo todo más ameno. Lo que no puedo hacer es ir casa por casa a relataros mis andanzas por los intergüés, pero si os lo proponéis, podemos pasar un buen tiempo juntos.

Gracias por leer my shit, y nos vemos en la próxima.

Ah, por cierto, me gustaría hacer algo un poco innovador. Cogeré alguna palabra extraña dentro de mi enfermo subconsciente, y la buscaré en Google Images. Más tarde, cogeré la más significativa. Lo gracioso sería que intentáseis adivinar qué palabra de todas es la que he cogido, de forma que podáis decir "¡Je, je! ¡Los locos me caen simpáticos!". No os prometo nada divertido, porque eso depende de como lo hagáis vosotros, malandrines.

¡Agur!